Demanda contra Tarantino y sus NFT podría abrir una zona gris en la ley

Tarantino parece estar en problemas, aunque no se muestra preocupado. Miramax, empresa productora de la exitosa película Pulp Fiction, ha decidido demandar al aclamado director por hacer uso indebido de los derechos de marca. Sin embargo, la demanda parece no aclarar si viola o no los derechos de autor al ser publicados dentro de un token no fungible (NFT por sus siglas).

En un documento publicado este 16 de noviembre ante un juzgado del Estado de California, Miramax ha decidido demandar a Tarantino por la puesta en venta de siete NFT relacionados con el guion de la película, los cuales ofrecerían descripciones a escenas nunca antes vistas, según describe el propio director.

Para Miramax “Tarantino mantuvo en secreto sus planes de Pulp Fiction NFT” dado que los derechos de la obra (cinematográfica) están en manos de la empresa productora, cuyo film ha sido uno de los que más ingresos le ha generado. No obstante, como expresa el propio documento de más de 22 hojas, Tarantino cuenta con derechos de distribución sobre el guion de la película desde 1993.

Según reseña la nota de CriptoNoticias sobre el lanzamiento de la colección de NFT de Tarantino, los coleccionables estarían conformados por piezas del guion nunca antes vistas, acompañados por una imagen inspirada en escenas de la película.

Sin embargo, la venta de algunos guiones originales, páginas o escenas como NFT es una transacción única, que no constituye publicación y, en cualquier caso, no entra dentro del significado [de lo que se define como distribución por medio impresos].

Documento de la demanda de Miramax contra Tarantino.

Debido a que los NFT son una tecnología nueva y netamente digital, Miramax alega que los derechos reservados por Tarantino sobre la publicación de guiones de la película no aplican en este caso. El abogado defensor alega que “no habría otro adornos o adiciones a los propios escaneos del guion” según detalla el propio documento de la demanda.

Tarantino ignoró las advertencias

La publicación de la futura venta de los NFT de Tarantino fue realizada el pasado 2 de noviembre. Luego de enterados, Miramax decidió enviar una carta de cesa y desista al director el día 4 de noviembre. Estos alegaban que la productora se estaba viendo afectada, al ser vulnerados sus derechos de autor.

Según continúa la descripción de los hechos en el documento, luego de darse por enterado, Tarantino y la cuenta de Twitter encargada del lanzamiento, @TarantinoNFTs, comenzaron a utilizar otros elementos de películas icónicas del director, como es el caso de Gordon Liu de Kill Bill. Para estas cintas cinematográficas Miramax posee todos los derechos de autor, según expresa el texto.

NFT y la zona gris de la ley

Según se describe anteriormente en esta nota, la empresa demandante alega que utilizar NFT para la distribución del guion, viola los derechos de autor de su marca. Sin embargo, el propio documento aclara que Tarantino cuenta con derechos de distribuir y publicar el guion, que el mismo escribió, y del cual tiene los derechos.

La demanda se centra en: el secreto guardado por Tarantino al no comunicar la publicación de los NFT, y la utilización de imagines alusivas a la película, de los cuales el director no posee los derechos. Aquí el papel que juegan los NFT podría definir si la demanda procede o no.

Actualmente en Estado Unidos, país en donde se realizó la demanda, no existe, o por lo menos no de forma explícita, un marco legal regulatorio sobre las leyes de distribución de contenido dentro de los NFT. Al ser un mundo pseudoanonimo, cualquier persona podría vender sus obras sin tan siquiera revelar su nombre.

Según expresa la propia cuenta de @TarantinoNFTs, los NFT “están destinados a empoderar a los creadores, conectándolos directamente con sus audiencias y comunidades” esto en respuesta a un tuit sobre la demanda de Miramax.

La respuesta en el tuit continua, esta vez haciendo promoción a Secret Network, una red de criptomonedas que ofrece comercio de NFT con transacciones privadas y anónimas. Lo que podría abrir la posibilidad de que los tokens, originalmente planeados a ser vendidos en OpenSea, migren a una plataforma NFT de esta red.