Mayor banda delictiva de Brasil habría incursionado en minería de Bitcoin

Un grupo táctico de policía militar de Sao Paulo, en Brasil, presuntamente desarticuló una operación de minería de bitcoin propiedad de la banda criminal más grande del país, conocida como PCC (Primer Comando Capital). Según medios locales, el operativo fue dado a conocer a través de un programa televisivo.

De acuerdo con la información, las autoridades policiales declararon que, mediante una denuncia, dieron con uno de los refugios del grupo delictivo, donde encontraron un lote de equipos de minería de bitcoin, cámaras de monitoreo, computadora portátil, caja fuerte y una máquina de tarjetas de crédito. La operación tenía como objetivo el lavado de dinero proveniente de la droga a través de bitcoin. El reportaje televisivo mostró imágenes y fotos del lugar de la incautación, así como los equipos de minería y otros encontrados.

Algunos especialistas en minería de criptomonedas expresaron a portales especializados sus dudas sobre varios de los aspectos del operativo policial revelados por las autoridades. En este sentido, señalaron que supuestamente existen varias inconsistencias en relación con una operación real de minería de criptomonedas.

Los expertos indicaron que la casa refugio donde fueron encontrados los equipos, no tendría la capacidad eléctrica para alimentar los más de 20 equipos incautados. Adicionalmente, en las imágenes se aprecia que los equipos de minería están apilados, lo que ocasionaría que se quemaran debido al calor que generan.

Por otra parte, los funcionarios habrían declarado que “ellos (los criminales) inyectan el dinero en la máquina, compran Bitcoin y lo almacenan”. Esta declaración dejaría en evidencia el desconocimiento de cómo funciona un equipo de minería, los cuales no reciben billetes como lo haría un cajero automático. Además, los equipo fueron identificados por los expertos como Whatsminers M3, modelo que, desde hace un buen tiempo, no es rentable para la minería de Bitcoin en Brasil.

Según los oficiales, los equipos fueron trasladados al 47º Departamento de Policía de Capao Redondo, en la zona sur de Sao Paulo, unidad que continuará las investigaciones del caso.

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