Bitmain falla en su intento de entrar a la bolsa de valores de Hong Kong

Bitmain, la conocida compañía china de minería, ha fracasado en su intento de hacerse pública en la Bolsa de Valores de Hong Kong (HKEx) a través de una Oferta Pública Inicial (OPI) con el vencimiento de su aplicación, iniciada el 26 de septiembre de 2018 y finalizada el día de hoy luego de su periodo de vigencia de 6 meses.

Una actualización del sitio web de HKEx, ha dejado en estatus de “vencida” la oferta pública de Bitmain Technologies Holding Company, quien había previsto recaudar hasta 20 mil millones de dólares a través de la OPI.

El fracaso de la aplicación se venía hablando desde el mes de diciembre del año pasado, cuando dos fuentes vinculadas con la bolsa de Hong Kong se comunicaron en forma anónima con el medio local South China Morning Post, indicando que existía renuencia en relación a la IPO de Bitmain, tanto de reguladores como de operadores del mercado de valores. Ello debido a que todavía se trata de una tecnología cuyas implicancias no están claras y que no cuentan con un marco regulador definido.

Sobre la noticia, Bitmain declaró en su blog que esperan una mayor aceptación de esta industria “joven” por parte de “las autoridades reguladoras, los medios de comunicación y el público en general” y se mostraron positivos respecto del crecimiento de su negocio.

Adicionalmente, hicieron el nombramiento oficial de su nuevo CEO, cargo que queda en manos de Haichao Wang, exdirector del área de ingeniería de productos de la firma, desplazando así a su anterior CEO y cofundador, Jihan Wu, quien junto a Micree Zhan, el otro cofundador, seguirá apoyando en el desarrollo estratégico de la compañía.

El fallido intento se produce en un contexto que suma numerosas dificultades para la empresa, entre otras, las grandes pérdidas en su negocio de hardware de minería, debido a la baja en el mercado de las criptomonedas, pero también por la denominada “guerra de hash” donde Bitmain ha debido enfrentar con grandes inversiones en equipos a bifurcaciones duras anti-asic, como la de Monero, o con el fin de ganar poder de procesamiento como en la de Bitcoin Cash.

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