¿La subida de precio de bitcoin se puede «tomar en serio» o es una trampa alcista?

Bitcoin (BTC) cotiza hace cuatro semanas en sus máximos del año sobre USD 30.000, registrando una apreciación del 100% desde los mínimos del 2022. Con ello, la pregunta que surge, según el analista Justin Ward, es: ¿se puede tomar en serio este movimiento o tal vez es una trampa alcista?

En el trading, se denomina trampa alcista a una estrategia financiera de un sector del mercado que lleva a que los precios de un activo suban temporalmente, atrayendo a los inversionistas a comprar, pero luego caen abruptamente, dejando atrapados a aquellos que compraron en el pico.

En un intento por responder si estamos en una trampa alcista o no, Ward introduce que el alza de bitcoin el último mes ocurre ante las solicitudes de BlackRock, Fidelity y otras compañías para lanzar fondos de inversión cotizados (ETF) al contado de bitcoin en Estados Unidos.

Comentó que uno podría suponer que, con “estos pesos pesados” persiguiendo un ETF para bitcoin, las autoridades cederán eventualmente. Como informó CriptoNoticias, en el pasado, la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC) ha desaprobado hasta ahora las solicitudes de fondos de este tipo.

Teniendo en cuenta eso, Ward sostiene que “no tenemos una bola de cristal, pero podemos imaginar que a medida que se intensifica la presión para alguna forma de regulación, las noticias positivas en este frente harán que esta ruptura alcista sea real”.

A nivel técnico, bitcoin se ve listo para ir por un precio más alto en la región de los USD 40.000, según la estructura de tres ondas, dijo Ward. Y destacó que en el pasado este indicador le ha servido para predecir correctamente la caída de la criptomoneda.

Cabe señalar que, en el análisis de precios, la teoría de tres ondas hace referencia a una subida a la que le sigue una caída y después un alza a un nuevo máximo. Esto es en caso de ser alcista, mientras que se da de manera opuesta si es bajista.

El analista profundizó que, tras el máximo histórico de USD 69.000 en 2021, pudo identificar, con una estructura bajista de tres ondas, que la ruptura por debajo de USD 32.000 conduciría primero a un objetivo de USD 14.900 y luego a USD 10.000 si no había signos de cambio de la tendencia bajista. Y efectivamente BTC cayó a un nivel de precios cercano al primer objetivo, precisamente hasta los USD 15.000 antes de cambiar la dirección hacia el alza.

Ward mostró en el siguiente gráfico que ahora, siete meses después del fuerte movimiento alcista de rechazo del fondo, se abre la posibilidad de una tercera ola hacia el alza. Esto es comprendiendo a la ola uno desde el fondo de USD 15.000 en noviembre del año pasado hasta abril cuando tocó los USD 30.000 por primera vez y a la ola dos cayendo desde allí hasta los USD 25.000. Entonces, con bitcoin cotizando nuevamente ahora en los USD 30.000, estaríamos ante la onda tres del mercado si el precio supera esta línea de rechazo.

Ward mencionó que podemos ver el intento de que se dé la tercera ola debido a que ha superado el rechazo que mostraba este año en los USD 30.000. “Si este movimiento se mantiene, podemos esperar primero USD 40.000 y luego USD 46.000 antes de que volvamos a ver la región de USD 15.000”, consideró, puesto que tales cifras han sido zonas de soporte-resistencia en el pasado.

De todas maneras, el analista aclaró que “es consciente de que un paso regulatorio positivo podría ser un factor tanto en la retención de la ola como en la rapidez con la que podría ir al objetivo. Ante ello, mencionó que él esperaría que la criptomoneda alcance USD 40.000 en los próximos 30-120 días. Como se observa en el análisis, no se trata de una “trampa alcista”, sino de una subida basada en los fundamentales de BTC.

Y después de una tercera ola al alza, ve posible una vuelta a los USD 15.000 porque, según la teoría de tres ondas, el mercado puede buscar el punto desde que despegó la primera ola como una prueba.

Qué es la teoría de las tres ondas

Así como otros indicadores, la teoría de las tres ondas fue diseñada para poder identificar la acción probable del precio de un instrumento financiero. Su base está en que un mercado financiero no puede navegar hacia arriba o hacia abajo sin hacer olas.

Esta teoría entiende que las olas son esencialmente un desajuste entre compradores y vendedores que establecen una dirección y un objetivo probables de precio. En este sentido, supone que, en un sentido alcista, una onda uno irá desde un punto bajo a uno alto donde encontrará un rechazo suficientemente significativo para formar la onda dos en caída y conseguirá superarla con la onda tres.