Las monedas inteligentes han sido vinculadas al lavado de dinero y al financiamiento al terrorismo en los últimos dos años, pero en los últimos meses han recibido comentarios positivos a este respecto; y de acuerdo al más reciente reporte del departamento de hacienda de Reino Unido, las monedas digitales tienen un bajo riesgo en este sentido, pero podría aumentar.
La institución del tesoro (Her Majesty Treasury) publicó su Reporte Nacional sobre el Financiamiento al Terrorismo y Lavado de Dinero 2017, documento en el que las agencias gubernamentales de Reino Unido establecen que el riesgo de uso de las criptomonedas, como método establecido para el financiamiento al terrorismo y el lavado de dinero, es bajo. Sin embargo el reporte especifica que dentro del Reino Unido no se ha comprobado el uso de monedas digitales para obtener bienes o servicios que puedan terminar en ataques terroristas.
De acuerdo al reporte, hasta el momento no existe una tendencia generalizada a utilizar las monedas digitales para comprar armas de fuego o utilizarse para “financiar un acto de terror”, y consideran improbable que el uso de las criptomonedas para estos fines aumente significativamente en los próximos cinco años.
El alcance de la financiación del terrorismo a través de monedas digitales hasta ahora ha estado limitado por su falta de uso generalizado (…) Se considera que es improbable que el uso terrorista de las monedas digitales aumente significativamente en los próximos cinco años.
Reporte
Hacienda
Con respecto al lavado de dinero, la estadística no se proyecta tan idónea a pesar de que sigue siendo baja la cantidad de casos de esta actividad, pues se han reportado pocos incidentes, pero que involucran grandes volúmenes de dinero; pero, el reporte comenta la creciente tendencia de la delincuencia digital en solicitar pagos en monedas digitales.
El Departamento del Tesoro de Reino Unido reseña tres áreas donde se están utilizando monedas digitales para actos delincuenciales; siendo el primero el pago de extorsiones por víctimas de malwares -o ransomware– u otros ataques en línea, pues los pagos recurrentemente son solicitados en bitcoin, o monedas privadas como Monero o Zcash. La segunda área señalada es el delito cibernético como servicio, y por supuesto la tercera vinculada al blanqueo de capitales obtenidos de cibercrímenes.
Las espectativas a este respecto no son muy esperanzadoras, de hecho, se espera que el lavado de dinero aumente más a medida que sean más utilizadas las monedas digitales.
Se espera que estos riesgos crezcan a medida que las monedas digitales se conviertan en un método de pago cada vez más viable y popular. A medida que crece el número de negocios que aceptan pagos en moneda digital, existe un riesgo creciente de que los delincuentes utilicen las monedas para lavar fondos sin tener que retirar dinero en monedas fiat.
Reporte
Hacienda
Conociendo el panorama, ¿qué hacer al respecto? El Reino Unido ha estado estudiando el funcionamiento de las monedas digitales sin establecer un marco que las regule. Al respecto en el informe aseguran estar en la búsqueda de configurar la forma de llevar a las criptomonedas dentro del alcance similar a la legislación australiana. Un hecho que significa que en el futuro próximo, el Reino Unido intentará incorporar las casas de cambio y los proveedores de carteras de criptomonedas a auditorías extraterritoriales.
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