El gobierno venezolano lanzó el petro (PTR), un criptoactivo respaldado con parte de las reservas petroleras del país suramericano, asegurando que cumple con los más altos estándares de seguridad y que será una solución para su economía interna. Sin embargo, en medio de su preventa y con el paso de los días, el proyecto genera suspicacia.
A través del sistema de compra del PTR dispuesto en el sitio web elpetro.gob.ve, un usuario puede con facilidad brindar información personal falsa y evadir de este modo los controles de identidad y antilavado de dinero; un elemento fundamental en la seguridad de todo proyecto relacionado a la compraventa de criptoactivos.
Para evadir las políticas de confirmación de identidad del usuario (KYC, por sus siglas en inglés) y antilavado de dinero (AML, por sus siglas en inglés), el usuario puede proveer documentación falsa o, en el peor de los casos, imágenes que no tienen nada que ver con documentos de identidad.
Tal y como se puede apreciar en las imágenes anteriores, es posible cargar como documento de identidad y pasaporte cualquier imagen de la red y el sitio web del petro validará esa información sin problemas. De hecho, un usuario puede basar todos los datos de su perfil en información falsa y acceder al proceso de “verificación” de su cartera, lo que quiere decir que los mecanismos KYC y AML no funcionan.
Por si fuera poco, existe otro detalle curioso que se deja ver al momento de querer invertir en el petro (PTR) y es que las monedas fiduciarias tienen restricciones importantes en cuanto a la inversión mínima que se permite realizar. El monto mínimo de inversión con divisas como el euro o el rublo es el equivalente a 1.000 EUR.
Al comparar esto con la inversión mínima permitida para comprar PTR con criptomonedas, el proyecto demuestra su alta preferencia por pagos hechos mediante estos instrumentos financieros. Para adquirir petros con criptomonedas como bitcoin (BTC), ether (ETH) o nem (XEM), el mínimo requerido es de apenas 50 EUR.
Para las transacciones en moneda fiat, los bancos intermediarios son el VTB Bank de Alemania y el Monsnarbank de Rusia. Por otro lado, el banco receptor de los recursos será el Banco de Desarrollo Económico y Social de Venezuela (BANDES).
Tanto las irregularidades en el proceso de verificación de usuarios, como el desbalance entre los mínimos de inversión para criptomonedas y dinero fiat son elementos que perjudican al proyecto; que actualmente, incluso ha sido calificado como una estafa por ciertos portales de evaluación de Ofertas Iniciales de Moneda (ICO).
Además, debido a las sanciones del gobierno de Estados Unidos contra la iniciativa, es probable que importantes casas de intercambio alrededor del mundo no trabajen con el petro. Una de estas plataformas de intercambio, como lo es Bitfinex, ya negó cualquier relación presente o futura con el PTR.
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