“XRP es una CBDC disfrazada de criptomoneda”

La comunidad, especialmente la bitcoiner, incurre constantemente en una comparación: la de la criptomoneda XRP con las monedas digitales de los bancos centrales (CBDC), una tecnología impulsada por Ripple que ha ganado tracción en Europa y la ha perdido en los Estados Unidos, con la prohibición.  

Las comparaciones entre ambas toman las siguientes formas en la comunidad. Según un usuario de la red social X, de quien no revelaremos el nombre, la criptomoneda XRP es “la CBDC que tu abuela te dijo que compraras. Tu abuela de 100 años”.  

Las afirmaciones anteriores traslucen que dicho usuario considera que la tecnología de XRP sería arcaica, lo mismo que las monedas digitales del banco central. El mismo usuario apuntala, más explícitamente, que “XRP no es más que una CBDC con otro emisor que no es la Reserva Federal”. 

Otro usuario, un maximalista bitcoiner, comentó en la misma red que “la lucha contra XRP es una lucha contra un futuro distópico de CBDC de control total”. Equipara, pues, la criptomoneda XRP con las CBDC. 

En neerlandés, otro crítico en la red social comentó, en un tono similar a los anteriores, lo siguiente: “Lástima que menciones la estafa XRP, es decir, la CBDC estadounidense, lo opuesto a bitcoin”. Otro cree haber detectado una paradoja en las actitudes del presidente de Estados Unidos: “¿Trump no quiere CBDC pero le gusta XRP?”.  

Una distribuidora de equipos para minar bitcoin en casa, SoloSatoshi, compartió un meme que sintetiza la opinión de un sector de la comunidad. 

Y la oleada de comentarios no se detiene: 

¿Tiene razón la comunidad, y XRP es una CBDC? 

Como la descomposición de la sigla indica, una CBDC es una central bank digital currency; o sea, una moneda digital del banco central. Lógicamente, una moneda del banco central tiene que ser emitida por esta entidad, o al menos gestionada por ella, para que se la considere una CBDC.  

XRP es una criptomoneda que funciona alojada en un registro contable público asegurado por nodos y validadores según un grado de descentralización bajo comparado con el de Bitcoin, donde operan más de 20.000 nodos al momento de la redacción.. Una moneda digital del banco central, por su parte, posee un solo garante: la entidad que la gestiona, y está alojada, potencialmente, en una red privatizada no distribuida y en un único servidor. Decir que XRP es una CBDC no es, pues, una comparación válida conceptualmente hablando.  

Más allá de la comparación conceptual, ¿tienen razón los bitcoiners? 

Es cuestionable pensar que la comunidad no sabe que es una contradicción conceptual decir “XRP es una CBDC”. Más probable es que la comunidad esté percibiendo una relación funcional entre XRP y la CBDC por debajo de las apariencias. 

Como reportó CriptoNoticias, Ripple está empujando un lobby para agregar la criptomoneda XRP a las reservas estratégicas, esto gracias a la buena relación que su CEO, Brad Garlinghouse, parece tener con Donald Trump y la Casa Blanca. Un sector de la comunidad ha reaccionado negativamente a la inclusión de XRP como reserva estratégica de los Estados Unidos. 

Si bien XRP funciona en una red con un libro público relativamente descentralizado (XRPL), la moneda también es el medio de cambio en plataformas centralizadas y con contabilidades privadas, como Ripple CBDC Private Ledger y Ripple Payments. Esta privatización de los libros contables permite que algunos bancos y entidades financieras mantengan un control y un derecho de conocimiento exclusivo sobre los flujos de pago. 

En consecuencia, XRP es una criptomoneda híbrida, que funciona tanto en un sistema distribuido, el de los criptoactivos descentralizados, como en sistemas privados, al modo del de los bancos y finanzas tradicionales.  

La coexistencia de una misma criptomoneda en sistemas privados y públicos puede, teóricamente, causar una fragmentación donde no todas las transacciones con XRP están disponibles públicamente para su auditoria. Esto implica que parte del comportamiento del suministro de XRP puede permanecer desconocido y ser inauditable, a menos que la sincronización con el registro de la red pública esté garantizada siempre.  

XRP y su red están basados en la confianza 

Otra semejanza que existe entre las CBDC y XRP, específicamente con su ledger (XRPL), es que ambas están construidas como sistemas de confianza, lo que resulta contrario al espíritu que animó la creación de Bitcoin. 

Como reportó CriptoNoticias, XRP funciona con un mecanismo de consenso que no da incentivos a sus validadores y prefiere entregar confianza a un selecto grupo de ellos, llamado “lista de nodos únicos” (UNL). Según la documentación de XRP, “se ‘confía’ en que los validadores que aparecen en un UNL no se confabularán en un intento de defraudar al servidor que evalúa las propuestas”.  

En pocas palabras, la participación técnica para validar y correr nodos en la red de XRP depende de ser añadido o no a una lista especial, y no está garantizada por los incentivos de su protocolo. Bitcoin, en cambio, permite participar en su mineria y abrir nodos en su red, libremente y en cualquier momento, a todo usuario que se adapte a las reglas de consenso. 

Otra semejanza que la red XRPL y su criptomoneda tienen con las redes bancarias privadas y, por lo tanto, con las CBDC que funcionen usando libros contables privados con control exclusivo de entidades específicas, es la siguiente:  

Mediante las trustlines o líneas de confianza, algunos emisores de tokens en XRPL tienen el derecho de autorizar o no la tenencia de ciertas criptomonedas. Es decir, los emisores pueden escoger qué dirección puede o no almacenar una moneda digital.  

Bitcoin no podría funcionar más diferente: cualquiera puede comprar y almacenar BTC de manera no permisionada, pues no hay ninguna entidad en la red con poder de decisión tal.